Opciones de financiación para la compra de vivienda en España

El mercado inmobiliario de España está en pleno auge. Las ofertas y el parking de viviendas disponibles son cada vez mayores. Los precios competitivos y las facilidades de financiación hacen que España sea un país en el que la inversión inmobiliaria ha experimentado un incremento significativo.

Sin embargo, aún hay mucha gente que tiene dificultad para acceder a la compra de su primera vivienda. A continuación veremos todas las posibilidades de financiación disponibles para poder comprar un inmueble para todas aquellas personas que no disponen de un capital suficiente ahorrado.

Hipotecas bancarias:

Tradicionalmente, las hipotecas han sido el método por excelencia para financiar la compra de una vivienda.

Para entender como funciona este sistema hay que tener claros varios conceptos: El banco otorga un préstamo hipotecario con arreglo a un porcentaje sobre el valor de tasación del inmueble, no sobre el precio de compra. Este porcentaje (habitualmente del 80% del valor de tasación), implica que el cliente debe aportar por otros medios el 20% restante (o la cantidad que sea necesaria para llegar al precio de venta acordado). Además, a esta suma hay que añadirle los gastos de notaría y tramitación de la hipoteca, lo que suele significar entre un 3 y un 4% según entidades.

Los intereses de devolución también son variados, desde un tipo fijo de interés a uno variable o incluso mixtos. Antes de firmar una hipoteca es primordial comparar opciones con distintas entidades ya que entre unas entidades y otras la diferencia entre intereses, comisiones y gastos pueden suponer un buen monto.

En muchas ocasiones, las entidades cobran también un porcentaje por amortización total o parcial en caso de que la persona que ha contraído la deuda la pueda devolver total o parcialmente antes del tiempo acordado.

Los préstamos hipotecarios desgravan en la declaración de la renta.

Préstamo de capital privado

En ocasiones, los préstamos de capital privado son más sencillos de obtener (por implicar menos requisitos para su concesión) aunque los intereses, por norma, son mucho mayores.

Pero ¿quién ofrece estos prestamos de capital privado? Suelen ser empresas inversoras o personas particulares con capital para invertir que se dedican a conceder préstamos personales o hipotecarios a usuarios que no encuentran financiación en la banca tradicional a cambio de obtener beneficios gracias a los intereses.

Aunque esta actividad está regulada, las condiciones particulares de devolución así como los intereses suelen ser más abusivos y las consecuencias en caso de impago o retraso en las letras del préstamo pueden ser problemáticas, sin embargo son una opción a la que recurren cada vez más clientes que ven como sus opciones en la banca tradicional se van reduciendo.

Créditos personales.

No siempre es necesario solicitar una hipoteca para adquirir un inmueble. En ocasiones, es suficiente con contratar créditos personales.

¿Cuándo se puede optar por esta cuestión? Cuando el monto necesario es relativamente pequeño. Conseguir un préstamo personal es muchas veces más sencillo que una hipoteca, sobre todo si por ejemplo se compra entre los miembros de una pareja, lo que lo convierte en una de las opciones de financiación más practicas.

Las viviendas propiedad de los bancos, los inmuebles antiguos, o mal ubicados suelen ser con frecuencia mucho más económicos, aunque la mayoría de ellos requieren reformas parciales o integrales. Si se está dispuesto a pasar esto por alto o se cuenta con la posibilidad de realizar los arreglos pertinentes por cuenta propia, es una de las mejores opciones, ya que se puede adquirir una propiedad por un precio muy inferior al de otras de iguales o parecidas características.

Los créditos o prestamos personales tienen un tipo de interés diferente al hipotecario y suelen tener una duración mucho menor. Son muchas las entidades privadas que también ofrecen este tipo de préstamos.

Préstamos de familiares o amigos

En ocasiones, financiar una vivienda por medio de una entidad bancaria no es posible, ya que no se cumplen los requisitos (avales, ingresos, historial crediticio, nóminas, empleo fijo, etc), o por motivos varios. Muchas personas recurren a los préstamos familiares. Esto supone mucha mayor flexibilidad a la hora de devolverlos y, por lo general, exentos de intereses o con muchos menos de los que cobraría un banco o una empresa privada de inversión de capital.

Este tipo de préstamos deben hacerse igualmente según la normativa legal vigente y no están exentos de impuestos.

Alquileres con opción a compra

Este tipo de prácticas está extendiéndose cada vez más a la hora de adquirir una vivienda. Son varias las modalidades pero en general, se trata de un alquiler de larga duración cuyo importe está destinado a la compra del inmueble en cuestión. En muchas ocasiones se pide una cantidad como señal, y en otras, el resto del precio se abona acabado el tiempo estipulado de alquiler (varios años, por ejemplo). Esto permite al comprador reunir el dinero con tiempo (bien sea con un préstamo u otras opciones de financiación) mientras a través del alquiler mensual se va rebajando este precio de venta total.

Vistas estas opciones de financiación, ¿cuál te parece mejor para ti?