No pocos analistas destacan que este año será estupendo para la inversión inmobiliaria en España. Se espera que a lo largo del año se superen las expectativas con más de 550.000 transacciones. Los tiempos del hundimiento tras el pinchazo de la burbuja quedan atrás y ya se ve con optimismo la evolución del mercado desde hace unos años.
Una de las comunidades más atractivas va a seguir siendo la capital. En Madrid se ve crecer la oferta que a su vez va pareja de un crecimiento de los precios. Además, la demanda de vivienda para inversión está creciendo dadas las presentes condiciones. Se espera un crecimiento de la compraventa y los bancos cada vez son menos quisquillosos, de cara a conceder hipotecas.
Beneficios de invertir en propiedad
Con estas previsiones tan favorables, invertir en propiedad es una clara opción para sacar el mayor rendimiento a nuestros ahorros. Este es uno de los principales beneficios, adquirir un inmueble es hacerse con un bien activo que no estará sujeto a grandes vaivenes económicos, conviene destacar que la mayoría de bancos ofrecen unos intereses muy bajos que hacen complicado ahorrar, pero el mercado inmobiliario es amplio y siempre está la posibilidad de alquilar para sacarle aún más partido a ese dinero que está guardado en el banco.
En cuanto a la inversión internacional, existen grandes facilidades tanto para los ciudadanos de la Unión Europea como para los del resto del globo. En muchos casos las condiciones de compraventa cuentan con una financiación de entre el 65 o 70 %, lo que las hace muy atractivas. Estas ventajas parten de que la oferta la concentran los bancos y ofrecen grandes facilidades de financiación al comprador extranjero.
Por último, uno de los beneficios más obvios es el aumento de patrimonio, una manera de lograr una jubilación digna y legar un futuro brillante a nuestros descendientes. Una de las provincias más seguras para estas inversiones es Madrid.
Ventajas del alquiler
En muchos casos alquilar el inmueble ofrece grandes ventajas. Una de los principales son las deducciones que existen. Estas afectan a impuestos como el IBI, las tasas por la recogida de basura o el alumbrado, entre otras. También los gastos en administración y cuidados generales de la finca se ven reducidos considerablemente.
Además, también se dan reducciones en la declaración de la renta que, de m
anera general, pueden alcanzar el 60 %. Estas medidas son aplicadas en la mayoría de las comunidades autónomas, por lo que madrid seguirá siendo un buen lugar para invertir en el mercado inmobiliario. Incluso se pueden dar reducciones del 100 % en arrendamientos para personas entre 18-30 años si el rendimiento supera indicador público de renta de efectos múltiples.
Expectativas del sector inmobiliario a lo largo de 2018
Como ya avanzábamos, el 2018 va a seguir siendo un año positivo para el mercado inmobiliario. El 2017 tuvo un gran crecimiento y se cree que no se pisará
el freno durante este año. Si bien la crisis política catalana enturbia el panorama, se espera que el crecimiento del precio de la vivienda sea de al menos 5 o 10 %. Además, los expertos piensan que la cantidad de viviendas nuevas aumentará gracias a la mejora del empleo en la construcción. Sin embargo, no hay ni se espera alerta alguna por la creación de una “burbuja inmobiliaria”.
Los precios de la vivienda de segunda mano van a crecer de manera moderada en torno a un 5 % a nivel nacional. Por su lado, las comunidades presentarán grandes disparidades, en gran medida fruto de las políticas aplicadas en cada una de ellas. Según algunos informes, Madrid se coloca como la segunda ciudad preferida para la inversión inmobiliaria, solo superada por París. Sin embargo, algunos analistas dicen que ocuparía el quinto puesto, pero con buenas expectativas y potencial de crecimiento.
Los factores que permiten el alza de los precios se explican gracias a la coyuntura en la que vivimos. Las circunstancias macro económicas están ayudando a estos crecimientos. El momento de bonanza que vive la economía del país, la reducción del paro, los tipos de interés que permanecen muy bajos y la disposición a la concesión de hipotecas harán que las ventas crezcan un 23 %. Algo que sin duda dará alas a muchos inversores.
Conclusiones
Con todas estas perspectivas la inversión inmobiliaria en España es sólida. Algunos lastres pueden enturbiar el panorama, pero el optimismo es patente. El mercado inmobiliario madrileño se consolida y aparece como una de las capitales europeas en las que invertir.
Además, España ofrece grandes beneficios a la inversión internacional en una búsqueda del crecimiento económico y la creación de un círculo virtuoso que permita seguir la buena senda al país. Sin duda este año será uno grande para la inversión en este sector tras el hundimiento que produjo la burbuja hace una década. Puede que estemos ante la tan esperada luz al final del túnel.